La Melonera, el valor de la memoria
En plena Serranía de Ronda encontramos La Melonera, ubicada en una impresionante finca de unas 200 hectáreas repleta de encinas centenarias que se mezclan con varias plantaciones de viñedos…
Yo solo 2017 es un tinto 100% andaluz elaborado con Melonera y Blasco, variedades históricas recuperadas por bodega La Melonera, que ven la luz nuevamente tras una ardua tarea de investigación.
Yo Solo es el lema que luce orgulloso en el escudo de armas del malagueño Bernardo de Gálvez, en cuyo honor se ha creado esta serie limitada de 350 botellas.
Elaboración en tinto, maceración larga, fermentación controlada a 25ºC. En barricas abiertas de 300L. Con 15 meses de crianza en las mismas barricas de tercer uso en las que se ha fermentado de roble francés Allier tostado medio, resto en botella.
Nota de cata:
Nos ofrece un precioso color rojo picota con destellos violáceos. En nariz se muestra franco, con notas de fruta roja y negras bajo un fondo especiado. En boca es sedoso con taninos maduros bien integrados. Es un vino muy goloso con una personalidad marcada por las variedades históricas de las que procede y su entorno.
Tipo de vino | |
---|---|
Bodega | |
Cuándo abrirlo | |
Precio | Menos de 50€ |
Perfecto con | Estofados, caza, legumbres, salchichas frescas, setas, queso Payoyo |
Tipo de uva | |
Maridaje | Arroces, Aves, Carnes, Legumbres |
Denominación | |
Provincia | |
Alcohol | |
Temperatura de servicio | |
Yokato Puntúa |
En plena Serranía de Ronda encontramos La Melonera, ubicada en una impresionante finca de unas 200 hectáreas repleta de encinas centenarias que se mezclan con varias plantaciones de viñedos…
¿Me creerías si te dijera que el vino no tiene color? ¿Y qué tal si te digo que a partir de la uva tinta se puede hacer vino blanco? Comprender los factores que determinan los colores del vino puede facilitar mucha información, nos permitirá…
Hace tiempo que quería hablar de este tema, y como sois muchos los que me hacéis la consulta ha llegado el momento de tocar lo que llamo “el dilema Copérnico”. Existe un universo paralelo al mundo del vino, regido por formas, colores y materiales de